La vajilla que utilizamos también forma parte importante de nuestras comidas, y de seguro te has puesto a pensar más de una vez cuál sería la ideal para tu familia y tu cocina. Aquí te contamos lo que debes tomar en cuenta al momento de elegir, para que no te arrepientas nunca de tu decisión.

Ten 2 vajillas

Si está dentro de tus posibilidades ten 2 vajillas en casa; una para utilizar diario, más ligera, sin tantas piezas, más económica; y otra para eventos especiales, un poco más grande, de mejor material, más completa. 

Además, si tienes niños o algunos que van de visita, intenta tener para ellos platos y vasos más pequeños con materiales que no se rompan para no provocar algún accidente. Como añadido, los puedes escoger de su personaje favoritos.

El tamaño

Es uno de los aspectos principales a considerar. No es lo mismo comprar una vajilla para una familia de tres que para una de seis y mucho menos si la compramos para la casa de los abuelos o la casa donde siempre se reúne toda la familia.  Además, compra siempre un modelo que traiga uno o dos platos y utensilios extras para cuando sean más, pero también para reponer si alguno se pierde, se rompe o se daña.

El material

Como te comentamos anteriormente, intenta que los platos, vasos y demás utensilios que utilizas todos los días sean de un material resistente, en especial si tienes niños en casa. Recuerda que esto no está peleado con tener una vajilla bonita, de la cual te puedas sentir orgulloso de tomarle mil fotos y compartirlas con todo el mundo.

Te recomendamos materiales como melamina, cerámica e incluso plástico duro, esta última especial para los peques.

Diseño

Si para ti el color y la armonía en tu cocina es lo más importante, espera a tener los colores de las paredes, electrodomésticos y hasta las cortinas y manteles para elegir la vajilla que vaya perfecto con todo. Ya sea que encuentres una que combine o que quieres que se destaque. 

Si no puedes esperar puedes elegir, compra alguna de colores claros, como el tradicional blanco o de cristal, que siempre vienen bien. Además, trata que sea lisa, ya que estan duran más en perfecto estado que las que tienen diseños decorativos.

Practicidad

Lo bonito no debe estar peleado con lo práctico. Porque a pesar de que queremos que nuestros platos, vasos, cucharas y todo lo demás se vea muy bien y combine con todo, no debemos dejar de lado el uso que que le queremos dar. De nada sirve que sea preciosa pero que no quepa bien tu comida, que no se pueda acomodar bien en tu comedor, que sea difícil de lavar o que sea muy pesada.