A nivel mundial se desperdician aproximadamente 1,300 millones de toneladas de comida, lo que serviría para alimentar a 2,000 millones de personas.
A nivel mundial se desperdician aproximadamente 1,300 millones de toneladas de comida, lo que serviría para alimentar a 2,000 millones de personas.
Aunque creamos que la mayoría del desperdicio de alimentos lo realizan las grandes empresas y las industrias, también en nuestro entorno e incluso en nuestro hogar somos testigos de comida, en ocasiones en buen estado, que es tirada a la basura. Un ejemplo pueden ser los banquetes en las fiestas, la comida en los restaurantes o los alimentos que no se consumen a tiempo y terminan por perderse.
Según datos de la ONU, a nivel mundial alrededor del 14% de los alimentos se pierden entre la cosecha y la venta minorista. A ello se suma el hecho de que aproximadamente el 17% de la producción total de alimentos se desperdicia: 11% en los hogares, 5% en los servicios de comidas y 2% en el comercio al menudeo.
Un ejemplo lo aporta la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Se refiere a las fiestas tradicionales en todo el mundo, sin importar la fecha, el país o el nombre de la celebración, el común denominador es la gran cantidad de comida que se prepara y por lo tanto la gran cantidad que se termina desperdiciando.
Además, no son solo los alimentos que se tiran, sino también se desperdician todos los recursos para llegar a ellos: semillas, energía, agua, tierra, dinero, mano de obra, transporte, tiempo de cocina, etcétera.
Asimismo en el transcurso de todos los pasos anteriores se contaminan suelos, agua y aire, y cuando los alimentos acaban en la basura se producen gases de efecto invernadero.
En México, de acuerdo con el Banco de Alimentos de México, un tercio del alimento producido se desperdicia, lo que equivale a 38 toneladas por minuto, que bien podrían alimentar a 25.5 millones de personas con carencia alimentaria.
Profeco cita a FoodPrint, para decir que aunque esa pérdida o desecho alimentos sucede en todos los puntos de la cadena alimentaria: granjas, barcos de pesca, procesamiento, distribución, tiendas minoristas, restaurantes y hogares, estos últimos son los responsables de la mayor parte del desperdicio de alimentos.
Entonces, luego de tener a mano está impactante información con datos alarmantes sobre el desperdicio de comida alrededor del mundo, sumado al contrastante índice de pobreza alimentaria que existe, no nos queda más que invitar a la conciencia para que en cada uno de nuestros hogares empecemos a cuidar más y más del aprovechamiento de nuestros alimentos.
Con información de SEMARNAT