En México las tradiciones y costumbres de siglos se convierten en celebraciones que llenan de fiesta, vida, colores y olores todos los rincones del país. Una de las celebraciones más representativas para los mexicanos es el Día de los Muertos o Día de los Fieles Difuntos, que se celebra cada año el día 2 de noviembre. 

Estos días vienen acompañados de una gran variedad de comidas, bebidas y adornos que se colocan en el altar en honor a los familiares y amigos que se han adelantado, ya que según la creencia popular, regresan a casa una vez más para disfrutar de un banquete que se les ha preparado con aquellos alimentos que más disfrutaban en vida.

El altar tiene diversas representaciones según la cantidad de niveles. El altar de dos niveles representa el cielo y la tierra, los de tres se le agrega también el purgatorio, y el de siete niveles simboliza la escalera para llegar al cielo.

Los altares son una muestra de la creatividad de las familias que los preparan mezclado con los gustos de la o las personas a las que va ofrecido, pero hay algunos elementos que nunca deben faltar y aquí te decimos cuáles son.

Agua

Se coloca en el altar para calmar la sed de los visitantes luego de recorrer un largo camino para regresar de visita al mundo de los vivos.

Sal

Para purificar el lugar y ni permitir la presencia de malas energías.

Comida:

Como comentamos anteriormente, se cocina los alimentos preferidos de los seres queridos que con cariño recordamos, pero algunos de los platillos más comunes son el mole, los tamales y el pozole. 

Pan de muerto

No puede faltar para estas fechas este pan que se comparte en familia, con su tradicional diseño y su interesante significado. Hay diferentes preparaciones y lo puedes encontrar relleno. 

Calaveritas de dulce

Para endulzar la celebración se colocan calaveritas de azúcar, amaranto o chocolate, con el nombre del difunto en la frente. Aparte de ricas, aportan un toque de color al altar con sus llamativos diseños.

Bebidas

Además del agua, en los altares podemos encontrar diferentes bebidas como café, atoles, jugos y en muchas ocasiones las bebidas alcohólicas preferidas del difunto: tequila, mezcal o pulque.